El Granate resolvió el escollo que le presentó La Unión de Colón con un sólido 89-75, en su casa, para engordar la impresionante marca a 20-7 (74%) con la que permanece en la cima absoluta de la Conferencia Sur. Con un dominio claro desde el salto inicial, el local navegó con autoridad a la victoria.
En cuanto al conjunto entrerriano, esta caída significó la tercera al hilo en su gira por Buenos Aires y ostenta un registro negativo de 12-14 (46%), con el que marcha por la undécima colocación del escalafón y se alistará para recibir a Hispano Americano, el venidero 7 de marzo.
Más allá del sustento habitual que consiguió con los triples (12/25) en lo colectivo, el equipo de Sebastián Saborido disfrutó de una tarea desequilibrante de Franco Alorda, que se erigió en el goleador de la velada con 21 puntos (10/13 en dobles) y 4 rebotes, además de la gravitación de siempre de Andrés Lugli con 11 unidades, 8 recobres, 5 asistencias y 3 robos. En el rincón visitante sobresalió la labor de Facundo Gago con 21 tantos, 6 asistencias y 4 rebotes.
El juego arrancó musicalizado por el ritmo de un bajo goleo, que se graficó con el 5-3 del anfitrión, a los 5 minutos. El Grana apretó en defensa, con la intensidad como rasgo para presionar a la bola y la línea de pases, para luego buscar en la pintura a un descomunal Alorda (12). Con esos argumentos, el dueño de casa cerró con una renta de 20-10, contra un Rojo errático (3/12 de campo).
La segunda unidad de Lanús saltó a la cancha en el segundo capítulo y conservó la energía para defender, así como disfrutó de la conducción de Mariano Gago (7 pts) y las acciones de Patterson (6) para tomar una distancia profunda de 38-18, con 5:15 en el reloj. La Unión reaccionó con un par de corridas y achicó 42-30, pero igualmente el local se retiró al entretiempo en ganancia 49-32.
Tras las charlas en vestuarios, el equipo de Entre Ríos elevó su ritmo, siempre motorizado en el combustible de un valiente y atrevido Facundo Gago (12 pts), por eso recortó a 56-46, en el meridiano del cuarto. Lanús lució desprolijo en la toma de decisiones ofensivas, así como estuvo distraído para el balance de los contraataques del rival. La visita le puso dramatismo al ponerse 61-56 abajo, con un triple de Gago. Una bomba de Di Muccio le dio aire al anfitrión para clausurar 66-58.
Las dudas se disiparon rápidamente en Lanús en el arranque del último episodio, con un parcial 10-2, que le permitió escaparse 76-60, a los tres minutos. A pesar de la superioridad en rendimiento del local, La Unión continuó batallando y no se entregó al acercarse 80-71, a falta de 2.40 minutos. Unas apariciones de Capponi y de Lugli sentenciaron el pleito y desataron el festejo del Granate.
Informe: Prensa Lanús.
Fotos: Diego Halasz/Prensa Lanús.
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