Los sanfrancisqueños, que fueron en desventaja durante todo el juego,
recién pasaron por primera vez al frente a 17 segundos del final, con dos
tiros libres de Homero Rash, quien así se transformó en el héroe de la
jornada.
Comenzó mejor la visita, más ordenado en ataque, con buena circulación de pelota y logrando sobreponerse a la asfixiante marcación del equipo de San Francisco. Rápidamente tomó la delantera 19 a 11, con un buen aporte de Gabriel Moravansky (acertado desde el perímetro) y Raúl López debajo de la canasta. Con el ingreso de Germán Fassetta y el mayor protagonismo de Iturria, San Isidro emparejó el partido en el inicio del segundo cuarto, se puso 20-21, pero nuevamente fue la visita que volvió a sentar supremacías y se disparó a nueve (36-27) al promediar el segundo. En base a arrestos individuales, el local consiguió meterse otra vez en juego y se fue al descanso a sólo seis puntos (38-44).
En el reinicio, Gimnasia pareció definirlo cuando sacó una luz de 11 puntos (65-54) que mantuvo hasta los 3m del último parcial, cuando se imponía 72 a 61.
A partir de allí, en base a garra y a la aparición del norteamericano
Darryl Johnson y de Germán Sciutto, quienes se cargaron el equipo al
hombro, San Isidro terminó por cristalizar una victoria milagrosa
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