• 25-04-2024
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Rivadavia y Racing con finales de lujo

Rivadavia Básquet venció de manera agónica al líder de la Conferencia Sur, Platense, por 71 a 70 con un triple en el final de Andrés Llaver, cuando los esteños perdían por dos. Un final no apto para cardiacos.

Un cierre que quedará grabado en la retina de todos los presentes. Cuando parecía que Platense volvía a cantar victoria, Rivadavia se apoyó en Andrés Llaver, primero para provocarle una falta en ataque a Blossom y luego para dar vuelta el marcador con un triple, en el momento más caliente.

Fue sin dudas el mejor partido de Rivadavia. Jugó a un gran básquet, movió bien la pelota, encontró los espacios y castigó desde el perímetro. Desde el arranque, los Naranjas tuvieron más eficacia que en los últimos partidos en tiros de campo, sobresaliendo el juego de Lazcano, mientras que Platense mostró sus armas en la pintura y se quedó con el cuarto (20-23).

Se encendió Grenni desde 6,75 metros con tres bombas de manera consecutiva y los Naranjas pasaban al frente, sacando una pequeña ventaja. El Calamar no estaba cómodo y el trámite se volvió muy friccionado, con muchas faltas que rozaban lo antideportivo (38-33).

Ya en el complemento, un par de decisiones arbitrales convirtieron al Brozovix en una caldera. Todos gritaban, todos pedían, todos protestaban. Ese pasaje del partido se vio envuelto en polémicas, Rivadavia por momentos se salió del juego y Platense aprovechó para descontar con su jerarquía.

Final para el infarto. Parecía que los Naranjas podrían cerrar el juego a su favor, más después de ir ganando 67-58 en 6´53´´. Sin embargo, Platense ajustó la defensa de una manera que la hizo impenetrable. Los de Vázquez con mucha paciencia, entendían que el partido se podía ganar.

A falta de 10´´, con ventaja de dos puntos para la visita y pelota a su favor para el cierre, Llaver le sacó una falta a Blossom en ataque y los mendocinos tendrían la última. El mismo Llaver sacó desde la mitad de la cancha, la jugada se ensució entre Grenni y Lazcano y con algo de fortuna, la bola cayó en poder del base rivadaviense, que no dudó en probar desde el perímetro. Su lanzamiento entró limpió y los Naranjas le ganaban al mejor de la Conferencia Sur.

Rivadavia logró lo que parecía imposible. Le ganó al Calamar, quedó tercero y ahora tendrá el fin de semana de descanso, empezando a pensar en la próxima gira de tres juegos que tendrá por Buenos Aires.

Informe: Prensa Rivadavia Básquet

Racing, con mejor cierre, se llevó un triunfo gigante. Los locales estuvieron torcidos desde la línea de simples (en los 3' finales 0-6) y Racing lo aprovechó para alzarse con la victoria 89- 86. Paredes (15) metió los últimos 3 puntos para el ganador.

En General Roca, Del Progreso y Racing (Chivilcoy) animaron un cotejo que fue ganando en emociones con el pasar de los minutos. La baja efectividad en los libres del equipo de Daniel Jaule y desaciertos en pasajes claves del juego le posibilitó al visitante ir con chances al aro contrario, donde el buen trabajo de sus internos (Morris 15 puntos, Ojeda 10 y O' Garro JR 12) y las apariciones productivas de De Pietro (17) y Paredes (15) condujeron al triunfo 89 (46) a 86 (45).

En la última del juego Progreso, con 12 segundos no pudo sacar el tiro de tres para llevar el juego a la prórroga.

Ambos equipos salieron con marcas individuales y se prestaron el dominio en el tablero. Lo mejor del equipo de Jaule empezó con los puntos de Brizuela y los cortes al cesto con aciertos de Marangello y Ledesma (5-2 a los 3' y 8-4 a los 5'). El visitante encontró en la movilidad, con las corridas de De Pietro y compañía, llegar al aro rival con soltura (12 a 13 a los 7'). Con el juego equilibrado el primer cuarto finalizó 25-26.

En el segundo tramo creció la labor de los internos de Racing, sobre todo con las intervenciones de Morris y O' Garro JR, quienes además de anotar, rebotearon bien para alzarse con segundas opciones; a Progreso ya le costaba entrar en la pintura rival. El partido siguió sin despegues en el tablero principal, fueron doble a doble hasta llegar al cierre del segundo capítulo (parcial: 45-46).

En el tercer episodio empezaron a aflorar los roces productos de marcas más intensas, entonces el partido fue tomando otro matiz; a los 5' del 3C un triple de Maranguello adelantó a Progreso 58-55. Pero el envión de los locales duró poquito. Esa levantada (ahora 65 a 58) se secó después del intento fracasado de 3 de Maretto (19 puntos). La visita respondió con un parcial de 10-3 y a la banca 68 a 68.

En el cuarto periodo, Racing volvió a jugar en equipo, con muchos pases de mano en las ofensivas estacionadas fue sacando puntos una y otra vez, y la contra también hizo hacer diferencias; De Pietro le dio gol con sus penetraciones y la dupla de extranjeros volvió a dar pelea en los rebotes.

Sin embargo, fue palo y palo porque un par de triples del local no permitieron la escapada (77-77 y 84-84 con 2' por jugar. Brizuela (17) ya se había ido por acumular dos intencionales, y el local buscaba la falta para ir a la línea porque ya estaba en bonus.

Desde la línea de libres se definió todo: Progreso malogró 6 libres seguidos y Racing acertó 3 de 4 con Paredes (26 sobre 33 para el visitante). Jaule pidió minuto para armar la última ofensiva con 12 segundos, pero el local, bien marcado por un rival que batalló una y otra vez en rodeo ajeno. El equipo de Dambrosio se llevó lo que buscó con mucha entrega grupal, la victoria.

Informe: Prensa Del Progreso

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